La intervención a través de la fisioterapia para un paciente amputado es la combinación de manejo a nivel físico, psicológico y ocupacional. Ese tratamiento globalizado debe ser continúo, desde el momento de la lesión hasta su máxima funcionalidad, es aquí donde radica la importancia de contar con un fisioterapeuta especializado que sepa abordar de manera correcta este tipo de situaciones, en nuestra clínica de Madrid contamos con un área de fisioterapia que está compuesta por profesionales encargados de intervenir y mejorar la calidad de vida de sus pacientes a través de diversos tratamientos manuales e instrumentales.
¿Qué es la amputación?
El término amputación viene del latín “amputatio”, que se refiere a la separación de un miembro de una parte del cuerpo, la misma es realizada mediante una cirugía. Este tipo de intervención, la cual es usada desde hace siglos, tiene la finalidad de disminuir la posibilidad de invalidez, eliminar extremidades que están afectadas y así salvar la vida de la persona.
La amputación proporciona nuevos patrones de marcha y carga, y pueden generar lesiones por sobrecarga o falta de uso…
Se distinguen dos tipos de amputaciones:
- Amputación de partes blandas; como la amputación de mamas debido a un proceso oncológico.
- Amputación de extremidades; como la amputación de la pierna debido a un evento traumático.
La amputación de miembro inferior puede ser de manera unilateral o bilateral, si es realizada en una articulación, lleva por nombre “desarticulación”
Posterior a la amputación, por lo general, las personas experimentan la sensación de miembro fantasma, que es la percepción del miembro amputado presente.
¿Cuáles son las causas de una amputación de miembro inferior?
- Alteraciones en la circulación sanguínea: arteriosclerosis, diabetes, obstrucción arterial, entre otros.
- Traumatismos.
- Heridas debido a armas de fuego.
- Pseudoartrosis infectada.
- Quemaduras.
- Congelaciones.
- Enfermedades oncológicas.
- Infecciones.
- Inflamaciones.
- Deformidades congénitas.
Rehabilitación en Pacientes Amputados de Miembros Inferiores
El programa de rehabilitación para los amputados se divide en cuatro fases: fase prequirúrgica, fase quirúrgica, tratamiento pre-protésico y tratamiento protésico. Siendo de mayor relevancia para la fisioterapia estos dos últimos.
Tratamiento preprotésico: Si la rehabilitación no es iniciada antes de la intervención quirúrgica, su intervención debe ser lo más rápido posible luego de la misma. El objetivo principal de esta fase es la de conseguir una independencia en relación a los autocuidados y la movilidad del paciente sin el uso de una prótesis, así como preparar al mismo para el uso de la misma.
En esta fase:
- Se le indica al paciente cómo debe colocarse el vendaje de manera correcta en el muñón (Que es la porción restante del miembro que ha sido amputado).
- Debe realizar ejercicios de fortalecimiento para el muñón.
- Ejercicios para la amplitud de movimiento articular.
- Mecanoterapia.
- Ejercicios de fortalecimiento de cuello, tronco y miembros inferiores con la finalidad de desarrollar el equilibrio y la independencia.
- Se realizan diferentes técnicas de terapia manual para proporcionar relajación y evitar adherencias de cicatrices.
- Uso de diferentes agentes físicos para disminuir el dolor y promover el fortalecimiento de la musculatura.
Tratamiento protésico: En esta fase ya el paciente ha debido alcanzar una correcta fuerza muscular y un correcto uso del muñón.
Cuando el paciente ha recibido la prótesis, se debe proporcionar un nuevo entrenamiento con la finalidad de aprender a usar la misma…
El tratamiento protésico se enfoca en conseguir un patrón de marcha que sea suave y simétrico, para así lograr el mayor rendimiento, evitar las compensaciones y una mejora en la estética. Luego del adaptamiento de la prótesis y su respectivo entrenamiento, el resultado funcional es óptimo. El mismo se divide de igual forma en cuatro importantes fases:
- En una primera fase de este tratamiento se enseñará la colocación correcta de las prótesis, correcciones posturales frente al espejo y ejercicios de equilibrio. Debido a la falta de experiencia con el uso de la prótesis, el paciente utilizará bastón como apoyo.
- En la segunda fase se aplicará patrones dinámicos de la marcha y postura, así como el uso correcto de prótesis en esta etapa. Se continuará con la práctica frente al espejo.
- En la tercera fase se procederá a la disminución del uso de la ayuda ortopédica, es decir, bastón o muletas.
- En la última fase se aplicará el tratamiento de la marcha en superficies irregulares, a subir y bajar escaleras y como se debe incorporar en caso de existir caídas.
La meta principal con respecto al paciente amputado en miembros inferiores es que este aprenda a caminar con su respectiva prótesis sustituyendo al miembro que ya no está, el éxito dependerá de su edad, energía, motivación, su condición de salud y el profesional encargado de su rehabilitación